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Este miércoles la Cámara de Representantes de los Estados Unidos aprobó el juicio de impeachment al presidente Donald Trump, justo una semana antes de que termine oficialmente su mandato.
Con 232 votos contra 197, Trump deberá enfrentar una acusación de «incitación a la insurrección», como presunto responsable de los sucesos violentos del pasado 6 de enero en el Capitolio de Washington.
La balanza se inclinó a favor de la propuesta del Partido Demócrata, tras sumar los votos de diez congresistas republicanos, quienes sostuvieron un debate de varias horas de duración sobre los pros y los contras de juzgar al mandatario, en medio de un clímax de violencia y con nuevos planes de agresión flotando en el ambiente político estadounidense.
En los próximos días el Senado, todavía de mayoría republicana, será el encargado de celebrar el juicio, y determinar la culpabilidad de Trump. Sin embargo, el jefe de la cámara alta, Mitch McConnell, advirtió que el proceso podría no concluir antes del 20 de enero, fecha de la toma de posesión de Joe Biden.
En cualquier caso se requiere de unos dos tercios de aprobación para condenar al presidente.
De avanzar la acusación, que involucra una serie de aspectos incriminatorios del proceder del presidente, Trump sería removido de su puesto y podría quedar descalificado para ostentar cualquier cargo público en el futuro.
