
📷 Tomada del perfil en Facebook de Virgilio Mantilla
✅ La semana pasada le habían puesto a compartir calabozo con un recluso diagnosticado y muy enfermo con coronavirus
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“Le pusieron a un hombre que estaba muy mal, muy mal, diagnosticado con coronavirus, y en vez de mandarlo para el hospital de la prisión, que está lleno, se lo metieron en la celda a Virgilio”, refirió a La Hora de Cuba la activista Leticia Ramos tras hablar por teléfono con el disidente preso Virgilio Mantilla el pasado domingo, y al que las autoridades de la prisión camagüeyana Kilo 8 incomunicaron telefónicamente esta semana, y luego sacaron de su calabozo con destino no precisado.
La también dama de blanco Leticia Ramos, refirió en un post publicado en su perfil de Facebook que Mantilla, quien se encuentra en la prisión de máxima seguridad , fue privado del derecho a llamadas telefónicas desde que denunciara el creciente número de convictos en la prisión que, según él, están contagiados con la COVID-19. Antes de sufrir la medida, el preso político camagüeyano había informado que los casos ya rebasaron las capacidades de atención del hospital de dicho centro carcelario. Según la propia Leticia, un funcionario de la prisión lo había amenazado con privarle de acceso a teléfono si seguía dando información.
La información no ha podido ser corroborada debido al secretismo que el Ministerio del Interior mantiene sobre lo que ocurre dentro de las prisiones cubanas. Las últimas noticias sobre el estado de salud de Virgilio, comunicadas telefónicamente por otro recluso a la periodista Yadisley Rodríguez y divulgadas por Radio Martí, hablan de un agravamiento de la salud del opositor, y de su traslado de celda a un lugar no identificado.
Mantilla, como es conocido, fue sancionado el pasado 22 de diciembre a siete meses de cárcel por el supuesto delito de acaparamiento. Había sido detenido dos semanas antes en su vivienda, durante un registro policial en el que, según declaró su hijo Lázaro Mantilla a Radio Martí, los agentes buscaban pulóveres de apoyo al Movimiento San Isidro. Días antes, el opositor camagüeyano había publicado en su perfil de Facebook fotos de él mismo usando un pulóver con un cartel solidario con dicho movimiento de artistas.
Virgilio Mantilla tiene 51 años y su domicilio se encuentra en el poblado de Céspedes. Antes de entrar a prisión, estaba al frente del grupo opositor Unidad Camagüeyana de Derechos Humanos. Había sido arrestado también en octubre de 2020 por repartir documentos históricos, según refiere el mencionado medio de prensa norteamericano. Años antes, durante un asalto violento a su vivienda por parte de Tropas Especiales, recibió golpes que le produjeron lesiones en la columna vertebral. En 2008 extinguió una condena de siete años por desacato a Fidel Castro, según el blog payolibre.com.
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