✍️ Yoe Suárez
📷 Tomada del perfil en Facebook de Carlos Macías López
El pastor Carlos Macías López levantó su voz este martes en redes sociales por la integridad física del artista independiente Luis Manuel Otero Alcántara, en huelga de hambre desde el domingo en su vivienda, sede del Movimiento San Isidro.
«Por una elemental cuestión de justicia, me solidarizo con su causa. No quiero que muera. Menos aún que sea asesinado», escribió el líder protestante en su perfil de Facebook.
Días atrás oficiales de la Seguridad del Estado, la policía política cubana, allanaron la vivienda de Alcántara, destruyeron piezas pictóricas del artista y lo secuestraron en una patrulla que atravesó a toda velocidad la calle Damas.
En conversación con este medio, el pastor consideró que «una de las expresiones de la libertad propia, es cuando respeta y defiende la libertad de los demás».
Además, dijo, «Dios no instituyó los gobiernos para que hagan lo que están haciéndole a Otero Alcántara, ni a ninguna otra persona, cuyo único ‘delito’ es pensar diferente».
«Yo no soy ni amigo, ni conocido de Otero Alcántara. Jamás hemos intercambiado una palabra. Posiblemente tengamos discrepancias en más de un tema —escribió el pastor Macías López en Facebook—. El arte que él hace, no lo entiendo ni en lo conceptual, ni en lo estético».
«Pero estoy totalmente en contra de que quien sea viole sus derechos humanos, en nombre de una ideología, por demás fallida», posteó en clara referencia a la tiranía socialista cubana.
La huelga de hambre de Alcántara es una muestra de su malestar por la destrucción de sus cuadros y la continua represión a la que ha sido sometido.
«¡Dejen en paz a los que piensan diferente! Basta ya de hacer daño. ¿Qué honor hay en ultrajar la dignidad?», posteó Macías López.
«¿Qué haría Martí, si se enterara que en la calle San Isidro hay un hombre siendo mancillado? —cuestionó el pastor residente en la provincia Matanzas—. Probablemente sea visto, machete en mano, montado en un corcel blanco a todo galope, para ir al rescate del hermano que sufre».
Y remató: «Las ideas no se matan».
Entre el martes y el miércoles pasado al menos tres religiosos católicos —dos sacerdotes y un diácono— han intentado acercarse a la vivienda de Otero Alcántara y han sido impedidos de hacerlo por oficiales de la policía que tienen cercado el lugar.
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