✍ Yunier Gutiérrez
📷 Belo PCruz/ vía YucaByte
El artista contestatario Luis Manuel Otero Alcántara inició una nueva huelga de hambre desde el pasado lunes 27 de septiembre, la tercera en menos de un año. Así lo confirmó la activista y curadora de arte Claudia Genlui Hidalgo, en una publicación en Facebook.
“Su cuerpo está más débil que nunca, acaba de estar enfermo con coronavirus y además está debilitado por las huelgas anteriores”, expresó Genlui Hidalgo, quien además es la actual pareja del artista.
La información fue filtrada por reos del penal de Guanajay, centro penitenciario donde permanece recluido el artista, en la provincia de Artemisa.
Su arresto se produjo durante las manifestaciones del 11 julio, cerca del conocido Paseo del Prado en la capital, y es acusado por los delitos de desórdenes públicos, desacato e instigación a delinquir.
Claudia, quien ha estado inquiriendo a las autoridades por la salud de Otero Alcántara, había hecho pública horas antes su preocupación y la de la familia al no recibir una llamada telefónica por más de 15 días, y aseguró en ese momento que el artista se encontraba en riesgo.
“La mayor preocupación es lo que pueda pasar con Luis Manuel, convaleciente de covid, débil, después de cuatro años de intensa fatiga, de tensiones psicológicas, de agotamiento psicológico y en medio de una coyuntura post 11 de julio”, aseguró a este medio Enix Berrio, tío del artista.
Berrio, quien sostenía conversaciones telefónicas dos veces a la semana con su sobrino, confesó a La Hora de Cuba que intuía sobre la realización de la huelga de hambre como una estrategia de lucha no violenta contra el régimen.
«[Luis Manuel] es consecuente con su manera de ser, no está dispuesto a sufrir prisión porque el régimen quiera que debe de ser encausado”, dijo.
En noviembre de 2020, el artista realizó una huelga de hambre y sed junto a otros activistas y artistas, para exigir la liberación del músico contestatario Denis Solís, mientras permanecieron atrincherados en la sede del Movimiento San Isidro, en la Habana Vieja.
Cinco meses después, se declara nuevamente en huelga de hambre y sed, para exigir en esta ocasión el cese de la vigilancia policía en los alrededores de su vivienda en la calle Dama 955 y la devolución de sus obras ultrajadas.
Otero Alcántara, quien hace pocos días fue considerado por la revista Time una de las 100 personas más influyentes del año y calificado por las ONG Amnistía Internacional y Prisoners Defenders como preso político de la dictadura, pudiera estar corriendo grave peligro para su vida, mientras permanece encarcelando en un centro penal de alta seguridad.
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